Una vez más, debemos situarnos al otro lado de la escena, dentro del propio cuadro o enmarcados en la misma secuencia de las películas que el autor nos presenta, para poder sentir esa escena o ese cuadro como los siente el autor, que probablemente no es otro que el punto de vista del director y del artista cuando crearon sus obras.
Una vez más, debemos situarnos al otro lado de la escena, dentro del propio cuadro o enmarcados en la misma secuencia de las películas que el autor nos presenta, para poder sentir esa escena o ese cuadro como los siente el autor, que probablemente no es otro que el punto de vista del director y del artista cuando crearon sus obras.