INTRODUCCIÓN «Araneda por mi padre,
en Tagua Tagua nací,
y también les digo aquí:
Orellanas, por mi madre;
aunque a ninguno le cuadre
pregunto y noticias doy;...» .
Entre los poetas populares que dieron a conocer sus versos impresos en grandes pliegos en el Santiago de hace cien años, destacó esta poetisa de origen campesino.
No fue posible dar con la fecha de nacimiento de Rosa Araneda, pero, si se tiene en cuenta que en la época en que había adquirido gran fama, cercana a la revolución del 91, tenía cuarenta años, debe haber nacido en torno a 1850. Sus poesías circularon profusamente, junto con la de otros populares de su época, vendidas en las plazas, mercados y estaciones, desde donde seguían viaje a los pueblos.
Por datos que aparecen impresos al pie de los pliegos publicados por ella, se sabe que vivió en los barrios populares cercanos al Mapocho, como calle Andes 11-A, San Pablo 132-A, Sama 16-G y 73-A, o en la calle Zañartu entre San Pablo y Sama en los números 23, 18 y 9. Este último domicilio lo compartió con Daniel Meneses, poeta popular con quien convivió hasta su muerte. Actualmente la calle Sama corresponde a General Mackenna o Ismael Valdés Vergara.
Según sus propias palabras, su vivienda era humilde:
«Escucha lector o no
lo que te voy a contar
el jutre quiso allanar
y no pudo ni chocita» .
Desde allí escribía con su atrevido coraje, no solamente en verso, como lo que publicó en el periódico popular y democrático El Ají: «Al miserable que me mandó a insultar en una carta anómina le recomiendo pase a mi casa a reiterar sus palabras más inmundas que él» .
Respondió con fuerza a quienes criticaron sus versos o dudaron de la autoría de las composiciones que publicó:
«Cuarenta años de edad
tengo desde que nací,
lector si no crees dí
siendo que digo verdad;
sin que pase más allá
esta es mi sabiduría;
la que publico hoy en día,
alegan, vean qué cosa,
y dicen que no es tu Rosa
quien hace esta poesía.